La piel es el órgano más grande del cuerpo y está continuamente expuesta a factores externos que pueden dañarla, como los rayos UV, la contaminación y el estrés diario. Por eso, es fundamental proporcionarle los nutrientes adecuados, no solo para mantenerla saludable y radiante, sino también para fortalecer el sistema inmunitario.
Las vitaminas, especialmente la vitamina C, E, A, B3 y B7 son esenciales para una piel bien cuidada. Tienen muchos beneficios que no solo ayudan a proteger el cutis de los daños ambientales, sino que también promueven la regeneración celular, mejoran la textura y el tono, además combaten los signos del envejecimiento.
En esta guía, exploraremos la importancia de incluirlas en la rutina diaria -además de los tratamientos estéticos- y cómo beneficiarse de sus propiedades de manera óptima. ¡Seguí leyendo para aprender más!
Vitamina C
La Vitamina C es un antioxidante muy poderoso. Una de sus características más importantes es que es capaz de proteger la piel del daño causado por la exposición solar, la contaminación o los tan conocidos radicales libres. También cumple un rol crucial en la síntesis de colágeno, la proteína principal de los tejidos conectivos que conforman varias partes del cuerpo y que está completamente ligada a la aparición de inesteticismos como arrugas o flacidez facial.
Pero eso no es todo. Este nutriente también entrega luminosidad y ayuda a aclarar manchas oscuras, unificando el tono y reparando la piel dañada, ya que acelera el proceso de cicatrización de heridas.
La Vitamina C se puede encontrar en diferentes frutas y verduras, cómo los cítricos, kiwis, frutillas, pimientos, espinaca, brócoli, entre otros. A su vez, hay diversos sérums y boosters que también la contienen y que son ideales para usar de manera tópica en las rutinas de cuidado facial o en tratamientos faciales con distintos dispositivos, ya que logran regenerar las células de la piel, retrasar el envejecimiento, unificar su tono e inhibir la formación de melanina de manera más efectiva.
Vitamina E
La Vitamina E es un emoliente natural que ayuda a retener la humedad en la piel, manteniéndola suave e hidratada. También tiene propiedades antioxidantes que la protegen del daño y del envejecimiento prematuro causado por los factores externos.
Es muy útil para condiciones como dermatitis y el eczema, ya que ayuda a calmar la piel inflamada o irritada y a reducir el enrojecimiento. Sus propiedades regenerativas y cicatrizantes aceleran la curación de heridas y mejoran su apariencia.
Esta vitamina se puede encontrar en alimentos, como frutos secos y semillas -almendras, avellanas, semillas de girasol- aceites vegetales, verduras de hoja verde, la palta, espárragos y tomates. Para el uso tópico se consiguen en bálsamos labiales, lociones, y sérums, ideales para retener el agua en la piel, reparar, cicatrizar y proteger la dermis de los rayos solares UV y sus efectos nocivos.
Retinol (Vitamina A)
El Retinol se volvió muy popular en el último tiempo, esto es por los múltiples beneficios que tiene para la piel. Por un lado, promueve la renovación celular y la estimulación de colágeno, que ayuda a mejorar la textura y el tono de la piel y reduce las arrugas. Y por otro, previene el fotoenvejecimiento y es eficaz para el tratamiento del acné, ya que ayuda a destapar los poros, reduce la producción de sebo y disminuye la inflamación.
Esta vitamina se puede encontrar en verduras como la zanahoria, batatas, espinaca y kale, o en huevos y productos lácteos. El hígado es una de las fuentes más ricas en vitamina A. También se puede encontrar en cremas y sérums, suplementos y retinoides.
Niacinamida (Vitamina B3)
La Niacinamida, ayuda a mantener la piel sana, equilibrada y radiante, por sus propiedades antioxidantes y el fortalecimiento de la barrera de la piel. También reduce las hiperpigmentaciones, controla el sebo, calma la piel irritada y sensible ya que reduce la inflamación y el enrojecimiento, minimiza los poros, y reduce la apariencia de arrugas y líneas de expresión al promover la producción de colágeno y elastina.
Esta vitamina se puede encontrar en carnes como pollo, pavo, pescado y carne de vaca, o en hongos como los champiñones, maní y arvejas. También está disponible en forma de suplementos de pastillas o cápsulas, sérums, lociones, tónicos y cremas.
Biotina (Vitamina B7)
La Vitamina B7, además de ser beneficiosa para la piel, también lo es para el cabello y las uñas, lo que contribuye a una apariencia general más saludable.
Suaviza el cutis, ayuda a fortalecer la barrera cutánea y previene la sequedad y descamación. También reduce inflamaciones y enrojecimientos por sus características antiinflamatorias. Y promueve la regeneración celular, y acelera la cicatrización.
La Biotina se puede encontrar en salmón, atún o hígado, huevos, nueces y semillas -de girasol y almendras-, legumbres, granos integrales, y vegetales de hoja verde. También existen shampoos y acondicionadores que la contienen, sérums y cremas, y suplementos.
Todas estas vitaminas podés encontrarlas en el Sérum Complejo Multivitamínico de la línea Advance de Professional Beauty, que le devolverá al cutis lo que necesita para lucir sano y permanecer protegido de manera integral.
Otras vitaminas importantes
Además de las vitaminas nombradas anteriormente, hay otras que desempeñan roles muy importantes en el mantenimiento de una piel saludable y radiante, que además ofrecen beneficios únicos que pueden mejorar significativamente la apariencia y la salud de tu piel. Alguna de ellas son:
• Pantenol (provitamina B5): que humecta, desinflama y calma enrojecimientos. Estimula la regeneración celular y aumenta la elasticidad de la piel.
• Ácido Pantoténico (Vitamina B5): aumenta la hidratación y ayuda en la curación de la piel, reduciendo la pérdida de agua transdérmica.
• Vitamina K: contribuye a la reducción de ojeras y a la cicatrización de heridas, mejorando la salud general de la piel.
Tratamientos para potenciar los sérums de Vitaminas
Si bien los sérums se pueden utilizar de manera tópica en las rutinas diarias de cuidado facial, también existen varios tratamientos y dispositivos que pueden ayudar a mejorar la penetración de las vitaminas en la piel, maximizando su eficacia. Algunos de ellos son:
• Dermapen o Microneedling: las microperforaciones en la piel aumentan la absorción de los productos tópicos y permiten una penetración más profunda de los ingredientes activos en las capas dérmicas.
• Ultrasonido o HIFU: estos dispositivos emiten ondas sonoras de alta frecuencia que ayudan a abrir los poros de la piel y aumentar la permeabilidad de la barrera cutánea. Esto facilita la absorción de los productos tópicos en las capas más profundas de la piel.
• Terapia con Luz LED: algunos dispositivos de terapia con luz LED están diseñados para aumentar la penetración de los productos tópicos mediante la apertura de los poros y la mejora de la absorción de los ingredientes activos. Estos utilizan diferentes longitudes de onda de luz para abordar diversas preocupaciones de la piel.
• Electroporación: los pulsos eléctricos de alta intensidad crean brechas temporales en la membrana celular, permitiendo una mayor penetración de los productos tópicos.
• Radiofrecuencia: la energía de radiofrecuencia calienta las capas profundas de la piel y estimula la producción de colágeno y elastina. Algunos dispositivos pueden ayudar a mejorar la penetración de los productos tópicos al aumentar la circulación sanguínea y la permeabilidad de la piel.
• Dermaroller y masajeadores faciales: son una gran opción para complementar los tratamientos estéticos. Además, se los podés recomendar a tus clientes como apoyo domiciliario, para que los incorporen en sus rutinas de cuidado diario.
Si querés aprender alguno de estos tratamientos y conocer todo acerca de las técnicas y beneficios de cada uno, anotate ya en nuestras capacitaciones 100% online y con certificado digital.
Recomendaciones
Es fundamental reconocer que cada tipo de piel es único, con necesidades específicas que deben ser atendidas de manera personalizada. Por eso, antes de atender a un paciente, es necesario identificar su tipo de piel y comprender sus características particulares. Si tiene piel seca, grasa, mixta o sensible, si tiene acné, manchas o enrojecimiento, entre otros detalles. Esto te ayudará a seleccionar los productos adecuados que satisfagan las necesidades y objetivos de cada paciente de manera efectiva, maximizando los beneficios y minimizando cualquier efecto no deseado. También servirá para determinar qué tratamiento o dispositivo es la opción más adecuada para mejorar la penetración de los sérums de vitaminas en la piel.
Además, si se van a utilizar sérums o lociones que contengan vitaminas, hay varias recomendaciones a tener en cuenta:
• Consistencia en el uso: para obtener los mejores resultados, es ideal utilizar estos productos de manera consistente y ser paciente. Los resultados pueden variar según la persona, pero la consistencia es clave para obtener beneficios duraderos.
• Almacenamiento adecuado: es importante almacenar los productos de cuidado de la piel en un lugar fresco y oscuro, lejos de la luz solar directa, para preservar su estabilidad y eficacia.
• Combinación con protector solar: si bien hay vitaminas que protegen la piel contra el daño solar, no significa que reemplacen el protector solar. Por eso, es necesario usarlo como parte de la rutina diaria de cuidado de la piel.
Al seguir estas recomendaciones, se podrán aprovechar al máximo los beneficios de las vitaminas en el skincare, ayudando a mantener el cutis saludable, radiante y protegida contra los signos del envejecimiento.
Y vos, ¿usás estas vitaminas en tu gabinete? Contanos qué otras vitaminas sumás en tus tratamientos.
